Para realizar esta investigación, el autor se trasladó a varios sectores de la Reserva de la Biósfera Maya, principalmente ubicados en parcelas permanentes de medición, espacios que son utilizados para hacer estudios de dinámica en bosque natural. El estudio también abarcó otras áreas como la Unidad de Manejo San Andrés (hacia Melchor de Mencos) y el sur de Petén.

La motivación para realizar esta guía, explica el autor, surgió desde su época de estudiante, en la cual  carecía de mucha información y se desconocía muchos elementos de la biodiversidad de esa área: “Conocer la biodiversidad de nuestro país es importante, no solo porque estamos constantemente interactuando con ella; sino para entender los usos que podemos darle y lo que podemos obtener de ellos; muchas de las especies que nosotros contabilizamos son medicinales; en ese sentido es importante conocer la diversidad de plantas que tenemos en Guatemala”, explica.

En relación a la metodología el investigador  recibió la asesoría del Dr. Jorge Mario Vargas y el ingeniero David Mendieta, quienes le apoyaron para conocer los procesos sistemáticos necesarios para la determinación de las plantas: “Yo realizaba una determinación preliminar de cada planta en campo y posteriormente viajaba a la ciudad capital, donde en trabajo conjunto con mis asesores lográbamos identificar, a través de claves dicotómicas, cada una de las especies. El producto final, se obtuvo después de cinco años consecutivos de investigación”.

Desde el inicio, uno de los objetivos de esta guía fue simplificar el conocimiento, de esa cuenta, la información del libro puede ser asimilada perfectamente por personas que no necesariamente poseen conocimientos extensos de Botánica; contiene abundantes ilustraciones sobre morfología vegetal, cuatro apartados de claves dicotómicas, imágenes y descripciones de cada una de las especies, así como los usos etnobotánicos de cada especie:  “Es fundamental conocer el uso que se le puede dar a las plantas, hay especies forrajeras, melíferas, maderas preciosas, semi-preciosas, plantas tóxicas; un investigador o una persona particular puede identificar una planta a partir de las claves dicotómicas que están al principio de los cuatro grupos que tenemos en la guía y que están presentadas con una terminología sencilla ”, explica el autor.

La guía de campo tiene muchas aplicaciones, sin duda puede constituir un elemento valioso para los trabajadores de parques nacionales en recorridos turísticos para dar a conocer la biodiversidad de nuestro país, así como en inventarios y censos forestales nacionales, en identificación de especies en parcelas permanentes de medición para  lograr elaborar reportes con mayor validez, apoyo a la docencia en disciplinas afines y otros.

El Instituto Nacional de Bosques, (INAB) otorgará en los próximos días el Premio Forestal Nacional, a la Guía de campo para identificación de plantas arbóreas en Petén, Guatemala”, del autor Michel Palencia, como una de las tres mejores investigaciones a nivel nacional, en su categoría.

Actualmente, la guía de campo está a la venta en el Centro de Información y Documentación de la Dirección General de Investigación, CINDIGI, tercer nivel del edificio S11, campus central de la Universidad de San Carlos y próximamente, según indicó su autor, se realizarán las gestiones necesarias para hacerla accesible a los usuarios en otros puntos del país.  

Recolección y determinación previa de plantas en la Reserva de la Biósfera Maya.  Fotografía: Michel Palencia.