El 22 de abril se conmemora el Día Internacional de la Madre Tierra, proclamado por la Organización de Naciones Unidas desde el año 2009; sin embargo, ya se conmemoraba este día desde el año 1970, para de crear conciencia sobre la problemática ambiental del planeta. En esta ocasión entrevistamos al Ing. Agr. Pedro Soto, investigador del Instituto de Investigaciones Agronómicas, de la Facultad de Agronomía y de la DIGI, de la Universidad de San Carlos de Guatemala, quien nos responde algunas inquietudes ante esta efeméride.
David Marroquín (DM) ¿Cuál es la importancia de conmemorar el Día de la Madre Tierra?
Pedro Soto (PS) La importancia es que toda la subsistencia del ser humano radica en recursos naturales tanto renovables como no renovables, esto principalmente generados por un sistema y/o proceso terrestre, donde por medio de interacciones ambientales endógenas y exógenas dan como resultado las materias primas que genera una regulación de aprovechamiento para la vida humana, ejemplo de ello es la cobertura forestal, el agua, el aire, el suelo, los minerales, etc. Como tal, el planeta tierra reúne las condiciones perfectas para el regocijo de la humanidad, la cual, ha tenido una historia de aproximadamente 300,000 años, teniendo una asociación con el entorno y de evolución. Hoy en día la ciencia no ha podido escudriñar la existencia de otro planeta como la Tierra.
La Dirección General de Investigación de la USAC invita a visitar su biblioteca electrónica E-DIGI, donde podrá descargar publicaciones diversas en formato digital y de manera gratuita. En esta oportunidad le presentamos el documento Restauración y desarrollo sostenible en el ecosistema de pino-encino del altiplano central: una propuesta para la gestión de paisajes forestales (disponible en el enlace anterior) realizado por los biólogos Jorge Benjamín Jiménez Barrios, Estefany Jerenia Ordoñez Sayle, Bianka Anali Hernández Ruano y Juan Antonio Zelada. La restauración ecológica consiste en asistir a la recuperación de los ecosistemas que ha sido degradados o destruidos.